domingo, 9 de mayo de 2010

Natali

Tenía mucho amor para dar.

Para compartir.

Era un cascabelito.

Reía siempre.

Sus ojos siempre estaban luminosos.

Su espíritu era en verdad lindo.

Lo que no sabia…era que la vida no era un paraíso.

Lo que no sabía…era que su mundo ideal se desvanecería.

Lo que no sabía…lo supo con los años.

Ella creía en el amor, en todas sus variantes.

Pero en el que más creía era en el amor romántico.

Ese que se piensa eterno.

Ese pensamiento mágico que se apodera de nosotros cuando somos púberes.´

No sólo creía en el amor;

Natali….creía en los hombres.

Los veía fuertes.

Protectores.

Confiables.

Sinceros.

El sexo fuerte le daría a su vida toda la felicidad, la completud.

Y así fue como creció, con una idea sobrevaluada sobre los hombres, y muy devaluada con respecto a las mujeres.

En su mundo…aquella pequeña niña que fue…idealizó al otro sexo.

Y así fue, que eligió a los profesionales que la trataron, varones.

Los mejores educandos para ella fueron varones.

A sus amores los hizo crecer…apuntalándolos, aconsejándolos...ella se perdía en esas relaciones.

Los admiraba…era la contrapartida del feminismo.

Los años fueron pasando…Natali creció.

Conoció profesionales mujeres que tenían “el saber” en sus manos.

Los tardíos cambios de su madre, la hicieron reflexionar, sobre cómo podía cambiar una mujer sometida a ser una mujer digna, con ideas propias y a hacerse valer.

El crecimiento de su hija, con sus distintos puntos de vista, le daba otro cariz a su vida.

Su terapia la ayudó mucho, sus libros,

Se dedico a su crecimiento.

Justamente…crecer…aprender de los errores cometidos y no volver a cometerlos.

Pero ésta nueva mujer…ya no era la tierna niña que idealizaba.

Por fuera era dura como una roca.

Por dentro una dulce mujercita sensible.

Viviendo en la realidad se dio cuenta de su potencial…se dio cuenta que ella era su propia novia…

Que ella sola se protegía.

Que ella sola se levantaba el ánimo.

Que ella sola podía quererse.

Y así se dio cuenta….que antes “necesitaba”….

Ahora quiere; no necesita.

No depende…

Tiene vida propia.

Está sola en cuanto a pareja.

Está acompañada en cuanto a familia y amistades mujeres que ve cada tanto.

Más bien es una solitaria.

Elige…se da ese gusto.

Ya no está disponible para todo el mundo.

También cuida su energía…da valor a lo positivo.

Natali…algún día va a decidirse a no estar más sola.

Va a empezar a confiar.

A creer.

A querer.

A aceptar.

Pero ya tendrá una mirada distinta…

Ya no tendrá la idea de encontrar un príncipe encantado.

Tendrá la idea de encontrar a un caballero entero.

Tan entero como ella.

1 comentario:

  1. NO se porqué estoy llorando. No sé porqué sentí un golpe en el pecho al llegar a la mitad de la lectura. Será porque es tan real, tan mío. La diferencia entre Natali y yo, es que Natali creció y yo no sé que pasa que no puedo... Me encantó lo que escribiste Lau.

    ResponderEliminar